Martes Fiesta 28º Semana Ordinario 4º de salterio
Santa Teresa de Jesús
Primera lectura: Eclo 15, 1-6
Lo llenará del espíritu de sabiduría y de inteligencia.
Salmo: 88
R/. Cantaré eternamente las misericordias del Señor.
Evangelio: Mateo 11, 25-30
En aquel tiempo, tomó la palabra Jesús y dijo: «Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y se las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, así te ha parecido bien. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar. Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».
Reflexión:
Mística, doctora, renovadora del Carmelo, andariega…, los perfi les de esta mujer son variados, pero todos arrancan de un punto centrar: la pasión por Cristo y por la pasión de Cristo. Cristo ensu humanidad fue su libro de su contemplación y de su espiritualidad. Sus escritos no son una composición erudita sino resultado de su vivencia mística obtenida en la oración porque “quien a Dios tiene, nada le falta, solo Dios basta”. Desde ahí Teresa escribió “las Moradas”, que no son sino una senda, por etapas, para alcanzar, traspasar descansar en la Casa del Señor. En ella se cumplen las palabras de Jesús cuando da gracias al Padre por “haber revelado estas cosas a los sencillos”, a los humildes, pues como dirá ella: “humildad es caminar en la Verdad”.