Francisco de Asís en imágenes
Exposición organizada por la iglesia san Antonio de Pamplona
Tantos santos como maneras de mariposear en torno a la luz. Santos con las alas ricas como el terciopelo, santos con alas de libélula, santos con antenas largas, con patas finas. Es un hombre del aparato eclesial y es, tomándolo prestado de la jerarquía militar eclesiástica, por lo que nombra a su Dios: el Altísimo. Llamar así a Dios es olvidar la impaciencia de Cristo cuando aparta a los apóstoles que discuten, para dejar lugar a los niños. Es olvidar que nada puede conocerse del Altísimo, sino por el Bajísimo, por ese Dios a la altura de la infancia, por ese Dios a ras de tierra en las primeras caídas, con la nariz en la tierra.