Fray Emiliano Cantalapiedra: Memoria viva de una misión encarnada

Las Memorias de Fray Emiliano de Cantalapiedra son mucho más que un testimonio personal.

Fray Emiliano Cantalapiedra: Memoria viva de una misión encarnada

 

Las Memorias de Fray Emiliano de Cantalapiedra son mucho más que un testimonio personal. Este libro es un mosaico de experiencias, luchas y fidelidades, donde la historia reciente de la Iglesia misionera en Venezuela —particularmente entre los pueblos indígenas yukpa y barí— se entrelaza con la vivencia humilde y apasionada de un capuchino castellano que dio su vida al Evangelio. Esta obra, recogida por la Universidad Católica Andrés Bello en 2007 y hoy digitalizada en BIDICAP, es una fuente imprescindible para historiadores, antropólogos, misionólogos y lectores interesados en la verdad viva de la evangelización.

Fray Emiliano de Cantalapiedra (nombre civil: Jesús Benito González), nació en el corazón de Castilla y dedicó más de cuarenta años de su vida a la misión capuchina en la frontera occidental de Venezuela. El libro que ahora nos ocupa, Memorias, es fruto de una escritura pausada, “a ratos libres y a lo largo de varios años”, como él mismo confiesa. Esta escritura no persigue la retórica ni el aplauso: “Sólo quiero compartir recuerdos y vivencias con mis compañeros de Misión”, afirma con naturalidad. Pero el resultado sobrepasa con mucho su propósito inicial.

Lo que el lector encuentra en estas páginas no es sólo un diario de actividades, sino un retrato vívido de la vida misionera entre los pueblos originarios, con sus tensiones, sus momentos de gracia y sus desgarradoras injusticias. Como señala uno de los prologuistas, la obra permite “asomarnos a las emociones y vivencias que revelan la pasión misionera”, y vislumbrar “hasta qué punto la persona de Jesús está presente y acompaña al misionero” 

El estilo de Fray Emiliano es cercano, mezclando el castellano de su tierra natal con los localismos adquiridos de los pueblos entre los que vivió. El resultado es una lengua que, lejos de entorpecer la lectura, la enriquece con autenticidad:
 

Siguiendo la tradición de los capuchinos se ha sumergido en el pueblo sencillo, sin reticencias ni prejuicios, asumiendo sus expresiones y modismos

Consciente de que esto puede dificultar la comprensión de algunos términos, el autor incluye incluso un glosario final para orientar al lector.

Los capítulos dedicados a la Misión del Tukuko, San Antonio de Bachichida, San José de Ogdebiá o la Misión de Machiques no sólo documentan hechos, sino que transmiten el alma de una comunidad eclesial encarnada en la realidad indígena. “Estas correrías por la Sierra eran agotadoras —escribe—, pero la compañía de los yukpas reconfortaba. Eso lo experimenté yo durante los cuarenta años que viví con ellos” 

Las páginas que Fray Emiliano dedica a la historia, incluso a episodios tan concretos como la construcción de la iglesia en Tukuko en 1955, son de una riqueza etnográfica y espiritual notable. Como anotó el propio autor: “Muchos no se explicaban cómo en un sitio como ése, con camino malísimo, se hubiera construido esa iglesia” ... Detrás de cada piedra colocada, hay un gesto de amor y entrega al pueblo.

La lucidez de estas Memorias radica en su realismo. Fray Emiliano no idealiza la misión, pero tampoco la reduce a un esfuerzo humanitario. Es una entrega total al Evangelio. Por eso, narra con serenidad momentos de agotamiento, conflictos culturales, tensiones con autoridades, amenazas, enfermedades… pero siempre desde una perspectiva evangélica. Un ejemplo conmovedor lo encontramos cuando recuerda la muerte de Abel Pete, líder yukpa asesinado por sicarios defendiendo la tierra: “Murió el 21 de diciembre de 1961... defendiendo las tierras de los barí” 

El libro cierra con una visión de futuro, ya desde la perspectiva de quien ha recorrido largo trecho. En Machiques, en la última etapa de su vida, escribe: “Mis ganas por trabajar por el bien de mis hermanos seguían siendo muchas y muy grandes. Era feliz haciendo lo que me habían encargado que hiciera

 

BIDICAP: salvaguarda de una herencia compartida

Que estas Memorias puedan hoy leerse en formato digital no es casualidad. BIDICAP, la Biblioteca Digital de los Capuchinos, se ha convertido en un archivo dinámico, accesible y riguroso de la tradición franciscano-capuchina. Esta plataforma no solo recupera textos del pasado, sino que les devuelve actualidad, permitiendo que investigadores, teólogos, docentes y lectores del siglo XXI accedan a fuentes primarias, testimonios de fe y documentos de gran valor histórico. Gracias a este esfuerzo, la figura de Fray Emiliano no se diluye en el olvido, sino que permanece viva, disponible, desafiante.

Cita destacada

Proclama la Palabra de Dios, insiste a tiempo y a destiempo...” (2Tim 4,2).
Así describe uno de sus hermanos la vida de Fray Emiliano, quien nunca buscó protagonismo pero sí se dejó consumir por la llama de la misión.

Si deseas leer esta apasionante historia puedes seguir este enlace: Click aquí.

 

 

 

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