Fray Leopoldo: una figura entrañable
Hoy quiero hablarte de una figura entrañable como es la figura de fray Leopoldo. Figura querida por todos los Granainos por todo lo que significa no sólo su figura, su mismo nombre dibuja una sonrisa en los labios. Celebramos su fiesta y son miles de personas las que vienen de todas partes, para visitar su tumba, para rogarle por sus necesidades y agradecerle favores recibidos.
Decir fray Leopoldo es pensar en un verdadero hermano Capuchino.
Su persona se hizo familiar caminando por las calles de Granada.
En su tiempo existían unos hermanos llamados limosneros, encargados de recoger limosnas para la ayuda del convento.
Hermano prudente, callado, pero muy cercano a toda la gente.
Con su sencillo apostolado de las tres ave marías, daba seguridad y confianza a las personas que le pedían su intercesión ante el Señor por alguna necesidad.
Cuando pienso en él me pregunto cuantos fríos y calores no pasaría en sus andanzas por las calles de Granada, pero las supo vivir en clave de alegría y entrega ya que siempre tuvo en cuenta el bien de sus hermanos aunque esto le comportarse algún sacrificio para su persona.
Procedía de una familia humilde de Alpandeire. Familia de trabajadores y siempre tuvo su trabajo como medio de glorificar al Señor y hacerse pobre con los pobres como ahora se suele decir.
Toda su persona hablaba de pobreza. Se contentaba con poco.
No se cuente de él que diera discursos, pero sólo su figura hablaba de Evangelio.
Su sencillez y candidez hacía que los que se relacionaban con su persona, se sintieran a gusto y vieran en su figura la viva estampa de lo transcendente. No tenía dobleces, era pura trasparencia.
La familia franciscana, puede sentirse orgullosa de haber tenido en su seno a figura tan relevante.
Comprendo que sea punto de referencia para tanta gente y que todos los días nueve de cada mes y en especial el nueve de febrero que es fecha de su muerte, se desplacen hasta Granada,para sentir su cercanía y la fuerza de su intercesión.
Granada le debe mucho, pero no sólo Granada porque es una figura universal.
Te quiero mucho fray Leopoldo, por tu dedicación, por tu entrega y por tu AMOR SIEMPRE A PUNTO.
Como hermana franciscana, me siento orgullosa de ti.
Sor Francisca (Convento de San Antón -Capuchinas de Granada)