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Después de un largo periplo misionero por China, Alejandro Labaka llega a Ecuador en 1954 donde queda fascinado por el mundo amazónico. Tenía 31 años. Vivió en PIfó, Guayaquil, y Quito. En cada lugarse hizo notar transformando en obras sus iniciativas sociales. Con 45 años conocía bien la compleja realidad social de Ecuador, las mil y una dificultades para conseguir acceso a la educación, el hambre y ottras necesidades básicas de este pueblo.

En 1965 llega a Coca. En pocos años sería protagonista de excepción en los pueblos indígenas que habitaban la selva y otros pueblos de la sierra y la costa. Esta diversidad pluri-cultural entrañaba nuevos retos y por supuesto riesgos. La convivencia entre lo diverso se convertiría en una de las tareas de la misión.     

Su interés por la cultura original amazónica le llevo a crear CICAME -Centro de Investigaciones Culturales de la Amazonia Ecuatoriana, institución que los misioneros dedican a la formación de los pueblos amazónicos. CICAME es hoy referente nacional para la historia y conocimiento de estas gentes.  

Alejando defendió la supervivencia de estos pueblos. En diferentes ocasiones manifestó ante el gobierno y la industria petrolera la necesidad de respetar siempre la vida, el territorio y la autonomía de las tribus selváticas olvidadas. 
El día anterior a su muerte dijo al equipo misionero... "si no vamos nosotros los matarán". 

Tras la muerte de Alejandro e Inés los pueblos indígenas están siendo exterminados. Podemos decir que la sociedad ecuatoriana no ha creado un espacio para estos grupos ocultos ni en sus leyes ni en su conciencia moral. 

Con un "Puente entre Culturas" mostramos la realidad de aquellos que indefensos no pueden reclamar el espacio que por derecho le corresponde.

Es la primera vez que se lleva a cabo esta exposición denominada “Puente entre culturas-Kulturan arteko zubia” en Otxarkoaga (Bilbao).
La muestra tuvo lugar entre el 17 y 26 de enero de 2014 y será realizada en otras localidades del país. 

Otras actividades complementarias que se han ofrecido con la muestra:

-Charla de Miguel Ángel Cabodevilla (17 viernes): Acudimos a una exposición muy interesante realizada sobre la persona de Alejandro y la problemática que lleva consigo la realidad de los pueblos no contactados en el Aguarico (Ecuador). 
-Grupos de Misiones – Interculturales. Fueron reuniones especiales dirigidas por Xabier Parra, director de Sercade.
-Cortos sobre el tema desarrollado por Miguel Ángel Cabodevilla el viernes anterior.   

Estos son algunos comentarios que dejaron nuestros amigos en el libro de visitas:

-Me parece muy interesante esta exposición, donde he podido conocer la vida e historia de el gran misionero, Monseñor Alejandro. 
-Vengo con curiosidad a conocer la historia de Labaka, capuchino. Me ha sorprendido la entrega, la ilusión y sobre todo la valentía. 
-Para mí es un ejemplo de humanidad, de entrega hasta el final de una vida. Evangelio puesto en práctica y BUENA NOTICIA. Gracias. 
-Muchas gracias por la exposición que habéis montado con respeto a Alejandro Labaka. Representa la diferente forma de actuar con respecto a la sociedad actual. 
-Estoy contenta y muy agradecida a que hayáis traído la exposición de Alejandro Labaka a Otxarkoaga. Ha sido un privilegio. Muchas gracias. 
-Hay pocas personas como Alejandro e Inés. ¡Ojalá yo fuese una de ellas! Pero estoy segura de que los pueblos huaos resurgirán del fruto de estas vidas derramadas por ellos. 
-Alejandro Labaka… un ejemplo de vida al servicio de los demás, una historia que merece ser contada. Muchas gracias. 
-Alejandro Labaka, uno a seguir en el mundo. Quedan pocos como él. 
-¿Cuántas exposiciones, manifestaciones para que la voz de los más pobres sea escuchada? ¿Cuántos Alejandros Labaka, testigos de Jesús de Nazaret, junto a Inés, tendrán que ser perseguidos?¿Cuántas víctimas tendremos que contar para que la sangre pacifique la Tierra? Gracias Alex e Inés por vuestra vida. Echo en falta la presencia velada de Inés.

"Estas muertes se suceden en señal evidente de defensa de sus propios derechos más sagrados, arbitrariamente violados".
(Alejandro Labaka) 1976.