Miércoles 6ª semana Tiempo Pascual 2ª de salterio
San Victor, San Acacio
Primera lectura: Hechos 17, 15. 22—18, 1
Eso que veneráis sin conocerlo os lo anuncio yo.
Salmo: 148, 1-2. 11-12. 13. 14
R/. Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria.
Evangelio: Juan 16, 12-15
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
—Tendría que decirles muchas cosas más, pero no podrían entenderlas ahora. Cuando venga el Espíritu de la verdad, los guiará para que puedan entender la verdad completa. No hablará por su propia cuenta, sino que dirá únicamente lo que ha oído y les anunciará las cosas que han de suceder.
Él me honrará a mí, porque todo lo que les dé a conocer a ustedes lo recibirá de mí.
Todo lo que el Padre tiene es también mío; por eso les he dicho que «todo lo que el Espíritu les dé a conocer, lo recibirá de mí».
Reflexión:
Jesús no terminó su magisterio en su vida mortal: le quedaron muchas cosas por decir, dada la fragilidad de los discípulos. Desde el cielo, jun to al Padre, sigue ejerciendo su “magisterio” profundizado y ultimadopor el Espíritu, su hermeneuta en el conocimiento de la Verdad. Este es el Maestro interior que nos instruirá en el conocimiento profundo de Dios y de Jesús. “Tomará de lo mío”, porque no es un magisterio alternativo al de Jesús, y nos llevará al conocimiento de su Verdad, no de una verdad abstracta sino de la Verdad personal que es Jesucristo (Jn 14,6). El cristiano es un peregrino de la Verdad, que no es “algo” sino “alguien” y necesita guías para encontrarla, reconocerla, vivirla y anunciarla. Esa es la tarea que Jesús confía al Espíritu Santo. De ahí la necesidad de potenciar nuestra capacidad de escucha en la oración y en la profundización de la palabra de Dios.