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Mons. Celestino Aós, de 73 años, nació en Artaiz, una sencilla población de la merindad de Sangüesa en Navarra.

Desde que en agosto de 1955 ingresara en la Orden Capuchina ha desempeñado numerosas tareas de responsabilidad, servicios avalados por su amplio currículo (estudios filosóficos, teología y licenciatura en psicología) y experiencia docente como profesor en los colegios de Lecároz y Pamplona.

Desde 1983 fue destinado a la Provincia de Chile donde desarrolló su misión como Vicario en la Parroquia de Longaví y poco después elegido como Superior en la comunidad de los Hermanos Capuchinos de la Diócesis de Santa María de los Ángeles. En 1995 fue nombrado Párroco de la Parroquia de san Miguel en Viña del Mar.

Cuando se ha cumplido un año desde que el papa Francisco visitara Chile y se comprometiera en la atención de las víctimas de abusos y estrecha colaboración con la justicia civil, Mons. Celestino Aós marca un nuevo escenario en esta materia habida cuenta de su experiencia y trayectoria profesional, como buen conocedor de la Iglesia en Chile y los numerosos cargos desempeñados entre los que cabe enumerar:

• Tesorero de la Asociación Chilena de Derecho canónico.
• Miembro de varios Tribunales Eclesiásticos chilenos, en primer lugar en el Tribunal de Valparaíso, donde colaboró como Promotor de Justicia; posteriormente trabajó en el Tribunal Interdiocesano de Concepción, donde actuó como psicólogo y sucesivamente como Juez, cargo que desempeña en la actualidad.
• Miembro de Tribunales Especiales creados para estudiar:  el milagro de la canonización de San Alberto Hurtado;  la beatificación del Beato Tomás Reggio, Arzobispo de Génova y Fundador de la Congregación de Hijas de Santa Marta; - el proceso histórico y proceso de presunto milagro de la Beatita Benavides.

El 25 de julio de 2014 es nombrado obispo de la Diócesis de Copiapó.
Y hoy, el papa Francisco ha confiado a nuestro Hermano Celestino Aós la difícil tarea que vive la Iglesia en Chile.